Salud
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La poderosa industria farmacéutica hizo que la FDA le reconocieran como colesterol «malo» a la buena lipoproteína de baja densidad (LDL) y que bajaran los niveles normales del colesterol de 250 a 200 para así poder vender sus estatinas en PERSONAS SANAS.
El colesterol es insoluble en agua, por lo tanto para ser transportado en la sangre tiene que estar unido a una lipoproteína, por eso el hígado produce tanto el colesterol como la lipoproteína para transportarlo, llamada lipoproteína de baja densidad (LDL) o “colesterol malo”. La LDL transporta el colesterol desde el hígado hasta el interior de las diferentes células especializadas del cuerpo para así formar la membrana celular y producir las hormonas sexuales (progesterona, testosterona y estrógenos), cortisol, aldosterona y vitamina D.
Si una parte del colesterol que entró a la célula no es utilizado, la célula produce una lipoproteína de alta densidad (HDL) o colesterol «bueno” para sacarlo y transportarlo de nuevo al hígado (transporte reverso del colesterol) donde es convertido en ácido y sales biliares. Entonces, ¿por qué los cardiólogos insisten en afirmar que la LDL es un colesterol malo, si gracias a él es que se puede construir y poner a funcionar al cuerpo humano? Eso tiene su explicación:
A finales de la década de los años 70 y después de muchos años de investigación la industria farmacéutica logro desarrollar las estatinas para bajar los niveles de testosterona en algunos pacientes con cánceres de próstata y así evitar la extirpación de los testículos (castración) en hombres. Pero las estatinas también bajaban los niveles del colesterol total en sangre. ¿Qué hizo, entonces, la industria farmacéutica? Oh! decidió comercializar la venta de las estatinas para bajar el colesterol total y no para bajar la testosterona e hicieron Lobby en la Agencia de Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) y la Sociedad Norteamericana de Cardiología: 1ero. Para que bajaran los niveles normales del colesterol total de 250 mg/dL a 200 mg/dL y 2do. Para que le reconocieran a la LDL como un colesterol malo. También hicieron lobby en el Departamento de Agricultura de los EE.UU. para que incluyeran al colesterol en la lista de los alimentos dañino para la salud.
¿Resultado? Un negocio gigante!! Pues las estatinas que sólo iban a ser utilizadas en algunos pacientes con cáncer de próstata ahora iban a ser utilizadas en personas sanas con el colesterol entre 200 mg/dL y 250 mg/dL que es el 85 % de la población mundial!!
Si una persona tiene el colesterol total normal pero tiene el colesterol malo o LDL alto, calcificación arterial, placas de ateromas, si le hacen un bypass o le colocan un stem coronario los cardiólogos le dan estatinas y anti coagulantes diario y de por vida, a pesar de todos los efectos secundarios que estas producen a largo plazo.
Peter Gotzsche, un medico investigador e independiente Danés, que publico un libro titulado «Medicamentos que Matan y Crimen Organizado» donde denuncia lo siguiente: «El consumo de medicamentos con recetas, es la tercera causa de muerte detrás de las enfermedades cardiovasculares y el cáncer. En Estados Unidos la prescripción de medicamentos causa cerca de 200,000 defunciones al año. O sea que la industria farmacéutica causa cada año más muertes que los carteles de la droga». Entre los medicamentos que matan dos son usados en EXCESO por los cardiólogos: las estatinas (Lipitor y Crestor) y los anti coagulantes (Plavix y Xarelto). Estos últimos producen muerte por derrame cerebral o sangrado gastro intestinal.
EFECTOS SECUNDARIOS DE LAS ESTATINAS
Todas las estatinas inhiben la HMG-CoA, una enzima que interviene en la producción del colesterol, pero también inhiben la síntesis de la Q10, una coenzima que utiliza al colesterol como fuente de energía por lo tanto una disminución de estas dos enzimas puede producir debilidad muscular, cansancio y fatiga. El cerebro, hígado, páncreas y riñones tienen un 30% de colesterol por lo tanto una disminución prolongada de la síntesis del colesterol puede producir atrofia de estos órganos produciendo:
1) Pérdida de la memoria por atrofia cerebral.
2) Diabetes tipo II por disminución de la producción de insulina.
3) Hipertensión arterial disminución de la aldosterona.
4) Osteoporosis por disminución de la vitamina D.
5) Impotencia sexual en el hombre por disminución de la testosterona.
6) Elevación de las enzimas hepáticas pues las estatinas son muy hepato toxicas.
7) Irritabilidad por disminución de la Serotonina.
8) Muerte por fallo hepato-renal.
Las personas diabéticas, hipertensas, con vida sexual activa, osteoporosis o que tomen bebidas alcohólicas con regularidad no deben tomar estatinas.
Los cardiólogos, TODOS, saben muy bien de los efectos secundario de las estatinas, pero no se lo dicen a sus pacientes porque si se lo dicen no se las toman. Ellos solo les dicen que el colesterol les tapa las arterias del corazón y que las estatinas son para evitar eso daños arteriales, cuando en realidad lo que hacen es producir la muerte antes de tiempo.
En 1985 Michael Brown y Joseph Goldstein recibieron el Premio Novel Fisiología (Medicina) por descubrir el metabolismo del colesterol. Basado en esos estudio se demostró que el colesterol no era responsable de los problemas cardiovasculares ni de arteriosclerosis y que éste ultimo era producido cuando el sistema inmune se activa produciendo una vasculitis coronaria que inflaman y obstruyen los capilares que irrigan determinada zona del endotelio vascular que cubre el interior de la pared arterial y las células de esa zona, al no recibir suficiente oxígeno se mueren y las proteínas y el colesterol que contenían en su interior se descomponen produciéndose así las placas de ateroma. Entre las enfermedades que producen vasculitis coronaria están las vasculitis de vasos pequeños como la Sarcoidosis, la Granulomatosis de Wegener, Síndrome de Churg-Strauss o Lupus Sistémico, entre otras. Pero los cardiólogos no investigan estas enfermedades porque para ellos el colesterol es el UNICO responsable delas enfermedades cardiovasculares.
Anthony Colpo, un investigador independiente australiano, publicó varios libros sobre el colesterol, entre los que se encuentran LDL: Colesterol Malo o Ciencia Mala y La Gran Mentira del Colesterol. En este último él afirmo que : «No hay ningún estudio tipo causa y efecto realizado por científicos, sin relación o sin financiamiento de la gran industria farmacéutica, que demuestre que el colesterol es una causa relacionada con enfermedades cardiovasculares o aterosclerosis».
Uffe Ravnskos, un medico investigador independiente danés, que escribió el libro “Los Mitos del Colesterol”, donde ADVIERTE que: «Debemos tener presente que el colesterol es esencial para la vida, y reducir las síntesis del colesterol farmacológicamente o mediante dietas, puede ocasionar fisiopatologías mas graves que la que deseamos prevenir o curar». Lamentablemente eso…. NO LO ENTIENDEN los cardiólogos.
En el año 2015 el Departamento de Agricultura de los EE.UU. decidió sacar al colesterol dela lista de los alimentos dañinos para la salud (Naughty List). The Washington Post publicó lo siguiente: «El gobierno de EE.UU. finalmente aceptó que el colesterol no es un nutriente de preocupación. Se le acabo el negocito de enfermedades inventadas a los fabricantes de fármacos».
A pesar de todos los estudios científicos e independientes que demuestran que el colesterol no es dañino para la salud, no hay forma de que los cardiólogos comprendan que el colesterol es necesario para la salud y la vida y siguen usando las estatinas en PERSONAS SANAS para bajarles su colesterol por debajo 200. Eso es un CRIMEN!! Digámosle NO a los cardiólogos y a sus ESTATINAS.
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